MARRAKECH
Mis sentidos se vuelven locos en
esta ciudad que es luz, es vida, es color, olor a especias, bullicio…
Hay ciudades en las que hay tantos
museos y monumentos que cuando regresas parece que no has conocido la
ciudad.
Marrakech es
ciudad, es zoco, es pequeños locales de tomar un té a la menta o un cous cous
para chuparse los dedos…
Marrakech, la
ciudad ocrerrosada ,es una ciudad fascinante.
¿Qué hay que ver? Pasear y pasear,
perderse y no dejar de mirar….
Todo gira en torno a la plaza de Jemaa
el Fna.
Perdeos, deambular
Ahí van mis sugerencias
Tomar un té a la menta en la terraza del Café de la France, en un extremo
de la plaza. Las vistas de la Kutubia (la mezquita más importante de
Marrakech), al atardecer, el humo que sube de los puestos de comida, de tajines y sopa de harina, de la plaza a
lo lejos, el bullicio….Es una experiencia inolvidable y una experiencia que se
quedará en la retina para siempre.
Pasear por el zoco. Relajadamente. Mirar y mirar… Joyas, alfombras, cerámica,
marroquinería, perfumeros, babuchas, lámparas, tejidos… El zoco es puro
color, sensaciones, olor a sándalo, a especias…
Paraos en los puestos de especias, mirad, oler, dejaros llevar. ¡Color, puro color¡. Color a azafrán, a pimentón y otras especias, amontonadas formando triángulos…
Perderse En este lugar es lo mejor que te puede pasar. Y…seguro que os perdéis. Dejaos llevar
Deambular sin rumbo fijo por la Plaza Jemaa
el Fna. Es como entrar en un cuento de las mil
y una noche.
Contadores de historias, sacamuelas,
tatuadoras de henna, encantadores de serpientes, músicos, aguadores, puestos de
comida, de naranjas……
Un plaza para vivirla
La plaza es vida, pero no es sólo un
lugar para turistas, son los habitantes de la ciudad los que le dan vida.
Hombre y mujeres con chilabas y babuchas…
Comer un rico cous cous en Argana .En la terraza sobre la Plaza. ¡qué
rico¡
Pasear fuera de la muralla. Esa muralla rosada maravillosa….con las
montañas del Atlas al fondo…y de noche…inolvidable
Pasear por el Mellah (judería) y la plaza de
Ferblanties, la zona de los orfebres, con esas lámparas maravillosas, y tomarse un té en
cualquiera de esos locales llenos de señores mayores que miran el tiempo
pasar….Siempre observando la calle…
Señores mayores con su piel arrugada,
que parecen sabios. Sabios de esa sabiduría que da la vida, las largas
conversaciones ante un té de hierbabuena, mirando el devenir de la ciudad
Visitar las Tumbas Saadies, el Palacio de
la Bahia y el Palacio Badí. Mausoleos
suntuosos las primeras, una residencia principesca el segundo y un palacio
incomparable el tercero. Joyas arquitectónicas los tres. Amor a la belleza, el
desfrute…el rumor de agua…
Paseo por los Jardines de la Menara. Las montañas del Atlas son absolutamente inolvidables.
Visita a los Jardines Majorelle y
entenderéis porqué Yves Saint Laurent amaba esta ciudad. Cactus y azul añil.
Maravilloso
Una cena muy especial:
Stylia. Un palacio
maravilloso. Una gran puerta de madera y…por un pasillo lleno de pétalos de
rosas, se llega a un restaurante increible. Es un palacio….vajilla con hilo de
oro, comida exquisita, una fuente de las que nos llega el rumor del agua…
Quizá sea
el restaurante más bonito que he estado en mi vida. www.restaurant-stylia.com
Le Comptoir. En el barrio residencial de L’Hivernacle. Glamour y muy buen ambiente.
Bailarianas que animan la velada. ¡precioso local¡ Y un buen sitio para tomarse
una copita. www.comptoirmarrakech.com
Stylia es tradición, Le Comptoir es modernidad.
Alojarse: Lo mejor es un RIAD. Esas casas tradicionales de la
Médina…Pequeños hoteles con mucho encanto que te harán adentrarte en otro
mundo…tan lejos…tan cerca…
En mi caso: La maison árabe. Simplemente maravilloso.
Desayunos tranquilos con productos tradicionales, decoración íntima, sonido
de la llamada al rezo, un hamman….¡volveré¡ www.lamaisonarabe.com
Marrakech…la ciudad que hace que todos
nuestros sentidos estén despiertos
Yo estuve tres días y me espanto y estoy vivo de milagro. Jamás os lavéis los dientes con el agua del grifo aunque sea un hotel maravilloso.
ResponderEliminarJ.M.
Muchas veces he oído…Marruecos…o lo amas o lo odias…
EliminarMi viaje a Marrakech fui inolvidable, no tuve ningún problema con el agua, ni con la gente, ni caminando de noche por la Medina…
Alquilamos un coche y viajamos por nuestra cuenta a la costa desde Marrakech….
De veras siento que no todo el mundo tenga las mismas vivencias….
Me has abierto el apetito con tanto olor, sabor, color...
ResponderEliminarLa puesta de sol en la plaza tiene que ser impresionante!
Como bien has dicho yo creo que es una ciudad que o la amas o la odias. Cuando tenga el placer de visitarla te cuento mi experiencia (;
Un abrazo.
V.
Es una ciudad de sensaciones….
EliminarY yo adora dejarme llevar por los lugares.
Esta tan lejos culturalmente…que me apasiona.
No dejes de visitar ese lugar mágico