Suzhou y sus jardines inolvidables

SUZHOU

Suzhou es una ciudad antigua situada en la parte baja del río Yangtsé, a orillas del lago Tai. A poco más de una hora de Shanghai en tren de alta velocidad la ciudad está repleta de canales, puentes de piedra, impresionantes jardines y un museo absolutamete maravilloso.

Ahí van mis imprescindibles en esta ciudad con encanto:

Jardín del Administrador Humilde

Construido en el siglo XVI por encargo de un magistrado jubilado, este jardín de más de 10 hectáreas es una delicia para el pase, ya que hay varios lagos, pabellones tradicionales increíbles y una frondosa vegetación.

El paseo genera serenidad a pesar de la cantidad de gente que lo visita (recomiendo ir a primera hora de la mañana).

Perderse entre puestes, diferentes caminitos, observar el reflejo de los pabellones en el agua, disfrutar de los cerezos en flor, observar los detalles de las construcciones tradicionales, los muebles, los cuadros, los ventanales mirando al agua….es una verdadera gozada.

El jadín es una delicia, formado por agradables lagos, pabellones tradicionales y una frondosa vegetación.

 

Veréis que hay varias construcciones con circulo y cuadrados. 

Mis antiguas alumnas Elena y Olivia, que prepararon este inolvidable día me contarón que antes del siglo XVII,  la tradición china creía que el cielo eraun  círculo y la tierra  era cuadrado. Posteriormente,  esta idea se convirtió en una idea importante de la cultura tradicional china. Los antiguos también creían que el sol, la luna y la tierra se estaban moviendo de un lado a otro, sin terminar de girar, como si fuera un círculo cerrado no tuviera principio ni fin, y la tierra transportara silenciosamente a los humanos como un cuadrado inmóvil. Este pensamiento filosófico se muestra también en la arquitectura china. El círculo y el cuadro integran el cielo y la tierra y alcanzan un equilibrio.

Museo de Suzhou

El museo de Suzhou es una obra del gran maestro Pei. Pei es un famoso  arquitecto Chino-Americano, que probablemente os suene porque es el que diseño la Piramide del Museo del Louvre en Paris.

Para su primera obra en China escogio a su pueblo natal, ya que la familia Pei era una de las familias mas acomodadas e importantes de Suzhou antes de la Revolucion China.
El museo combina la arquitectura china y la arquitectura moderna y sobrepasó con creces mis expectativas.

Las colecciones, desde la antigüedad hasta la actualidad, son de una calidad y variedad altísima.

Se percibe una sensibilidad para tratar de transmitir la historia de cada colección, las sedas, el té y todo lo que gira alrededor de su ceremonia, la pintura, el jade, la evolución de la caligrafía y el arte de la misma, que me tiene fascinada.…

Además hay muchas zonas de descanso y un jardín interior maravillosamente diseñado, con contrastes del blanco y el negro, el bambú y el agua. Me quedé impactada.

Este museo recibe más de 2,3 millones de visitantes al año….y no me sorprende…! Además es gratuito.

 

Suzhou es conocida como la “Venecia China” debido a los canales que recorren la ciudad.  Existen diferentes barrios antiguos en zonas de canales y lo mejor es  perderse entre las callejuelas que transcurren a lo largo de sus canales al caer la tarde.

La zona de la calle Ping Jiang Road es una de las calles más. Aún conserva el antiguo pavimento empedrado y las tiendas mantienen los estilos arquitectónicos tradicionales como si no hubiera pasado el tiempo,

 además hay tiendas de artesanía, cafes, librerías, establecimientos con farolillos rojos que para cualquier occidental son una imagen del “tipismo” de China y multitud de puestes sobre los canales en los que pequeñas barcas tradicionales realizan paseos.

La otra zona antigua es Shan Tang Jie Street (tres paradas o cuatro de metro de una a otra). 

 

Es una calle de más de 1.500 años de antigüedad  que transcurre junto a uno de los canales, formando un precioso paseo donde encontrar pequeñas tiendas y muchos puestos de comida callejera.

Fuimos de noche y las vistas era increíbles¡¡¡¡

Y…las delicias callejeras….también¡¡¡ Me encantaron los distintos baos y el Xian Dou Gao (hecho con una lenteja verde dulce es su interior, calentito en el momento y delicioso).

Y para comer….fuimos a un lugar increíble donde me llevaron Elena y  Olivia. Una famasa casa tradicional de tallarines: Tong De Xing, donde yo era la única persona occidental, 

la carta eran unos carteles de madera en carecteres chinos y probamos una especie de anguila guisada en soja buenñisima, setas, verduras y uno tallarines absolutamente deliciosos con ese caldo de sopa….buenísimo.

Si tenéis tiempo suficiente, Suzhou tiene otros agradables jardines como Ou Yuan (Jardín Doble), Shizi Lin (Jardín del Huerto del León), Wangshi Yuan (Jardín del Viejo Pescador) o Xuanmiao Guan.

 

Xie Xie…chicas. Un dia Inolvidable¡¡¡¡